Bosques en Andalucía
1. Bosque de pino de El Juanar, Ojén (Málaga)
Altos hasta tapar el cielo son los pinos que conforman el bosque de El Juanar, al norte de Marbella ya en término municipal de Ojén. El Pinus radiata conocido comúnmente como pino insigne o pino Monterrey, es originario de la costa occidental de los Estados Unidos, específicamente de California, y en la Costa del Sol dibuja su particular paisaje dando oxígeno a este entorno maravilloso. Ponte calzado cómodo y disfruta de las rutas de senderismo que se realizan en el lugar y, sobretodo, sumérgete en este bosque que te regala al final del camino unas hermosas vistas del litoral malagueño.
2. Bosque de pino de los Montes de Málaga
Los característicos bosques de pino carrasco del Parque Natural Montes de Málaga hacen la labor de manto protector de los suelos. Sin su presencia, las lluvias podrían provocar grandes inundaciones. Así ocurría una y otra vez desde el siglo XV hasta hace menos de un siglo, como consecuencia de la tala de los antiguos bosques para cultivar vides, olivos y almendros. Ahora puedes disfrutar de este bosque y adentrarte en sus entrañas para llenar los pulmones de aire puro.
3. Bosque de pinsapos en Grazalema
Entre las provincias de Cádiz y Málaga se encuentra la Sierra de Grazalema que alberga una de las especies más inusuales del panorama natural, el pinsapo. Principalmente concentrado en la Sierra del Pinar, por ser el lugar más lluvioso de la Península, esta especie es descendiente de los abetos centroeuropeos que formaban aquí grandes bosques en las épocas glaciares. Hoy estos pinsapos habitan únicamente en este espacio, en el Parque Natural Sierra de las Nieves y en Sierra Bermeja (ambos en la provincia de Málaga), de ahí su singularidad. Una estampa inusual que sólo podrás realizarla en este paraje y que te dejará una de las imágenes más curiosas y significativas de la naturaleza adentrándote en sus bosques de pinsapos donde la vista se te pierde al contemplar a estos ejemplares.
El otoño supone una paleta de colores ocres y verdes oscuros que van pintando los paisajes de los bosques en Andalucía. Es la estación puente, el periodo de aclimatación de la naturaleza a los rigores invernales, es la fase que las especies tienen para prepararse para soportar el frío antes del renacer primaveral. No hay nada mejor en esta época del año que adentrarse en las entrañas de uno de estos parajes para llenar los pulmones de oxígeno puro.
Alcornoques, encinas, castaños, pinos y pinsapos son algunas de las especies vegetales que puedes encontrar en estas latitudes del sur de España si decides pasar un estupendo día paseando por un bosque en otoño. Disfrútalas haciendo senderismo, echando tus mejores fotos o simplemente paseando de forma placentera para contemplar cada detalle de estos ecosistemas. Te mostramos diez bosques naturales en Andalucía que no debes perderte si viajas al sur.
4. Bosque de Los Reales, Sierra Bermeja, Casares (Málaga)
Situada al borde del mar Mediterráneo, Sierra Bermeja es todo una atractivo natural que se puede visitar sea cual sea la estación del año, incluida el Invierno. Con muchas de sus laderas nevadas dándole aun mas una espectacular y exclusiva visión de tierra, mar y nieve. Aquí podrás encontrar el Bosque de Los Reales, un pinsapar que está protegido desde 1989 por la Junta de Andalucía como Paraje Natural.
5. Bosque de Los Alcornocales, Tarifa (Cádiz)
El parque natural de Los Alcornocales se extiende por la zona costera de Tarifa y se compone de un enorme bosque que abarca esta especie tan extendida a lo largo del Mar Mediterráneo. Se trata del bosque de alcornoque más extenso de España y uno de los más grandes del mundo, en un magnífico estado de conservación aunque manteniendo el aprovechamiento humano del corcho. A diferencia de los montes alcornocales de otras latitudes donde la espesura es baja, en esta zona los árboles forman auténticos bosques acompañados de una rica y variada vegetación arbustiva y herbácea en íntima conexión, que asegura la regeneración natural del bosque, una buena mezcla de edades, y una biodiversidad florística y faunística muy elevada.
6. Sierra de Tejeda, Almijara y Alhama
Escenario de hechos históricos entre moros y cristianos, y tierra de bandoleros, la Sierra de Tejeda en la Axarquía malagueña ofrece una gran variedad de rutas que recorren unos paisajes otoñales que seguro te alegrarán la vista. Coronada por la cumbre más alta de la provincia de Málaga, La Maroma (2060 metros de altitud), además ofrece al viajero bosques, cascadas y desfiladeros que recorren algunos de los pueblos más bellos de Málaga. Típicos pueblos blancos en los que la imprenta morisca queda patente con sus calles estrellas y empinadas, engalanadas por todo tipo de flores.Uno de los puntos clave de la zona es Canillas de Aceituno, punto de partida de algunas de estas rutas, donde el bar Ángel ofrece los platos más típicos del lugar. No te pierdas su chivo a la leña y los churros de la mañana para entrar en calor.
7. Bosque de rocas en el Torcal de Antequera
Aunque también formado por encinas, quejigos, serbales o arces, este bosque es uno de los más particulares ya que podríamos decir que se trata de un bosque de rocas, donde muchas especies vegetales se han adaptado a crecer entre sus fisuras. El paraje natural de El Torcal de Antequera transcurre por caprichosas formaciones rocosas de piedra caliza con más de 150 millones de años, formadas por sedimentos marinos del periodo Jurásico. Desde luego uno de los paisajes kársticos más importantes y singulares de Europa, ¡merece una escapada otoñal!
8. Bosque de pinsapos, Sierra de las Nieves (Málaga)
Los pinsapares son una de las más bellas formaciones boscosas de la Península Ibérica, y se configuran normalmente como bosques puros, densos, sombríos y húmedos, que parecen propios de zonas nórdicas, sobre todo, cuando durante el invierno los cubre el manto blanco de la nieve. En ellos suelen mezclarse árboles viejos y retorcidos con jóvenes de formas piramidales, acompañados con un sotobosque característico y con una fauna especial. Todo esto puedes encontrarlo en la Sierra de las Nieves donde, además de disfrutar de la naturaleza, puedes apuntarte a las excursiones de fotografía paisajística que se organizan.
9. Valle del Genal
El castaño es una de las especies más características del Valle del Genal, que durante el otoño proporciona una estampa sin igual. Se podría decir que ésta es la imagen del otoño en Málaga por excelencia, llena de colorido y belleza. Se enclava dentro de la Serranía de Ronda a lo largo de la depresión del río Genal, y es un lugar ideal también para la recogida de setas. Recuerda, eso sí, que debes ir acompañado de un experto en micología, ya que hay muchas especies que pueden llegar a ser mortales. Además de castaños, el pino negral, la encina y el quejigo andaluz conforman bosques espesos que recorren multitud de pueblos perfectamente integrados con la naturaleza con grandes exponentes como Genalguacil, Parauta o Igualeja.
10. Bosque de pino mediterráneo, Sierra de Mijas (Málaga)
La Sierra de Mijas guarda en sus entrañas un hermoso bosque de pino mediterráneo desde donde se puede avistar toda la Costa del Sol. El recorrido no es sencillo pues se trata de terrenos empinados pero la experiencia merece la pena. La flora consta de pinos y abundante matorral mediterráneo, como tomillo, romero y palmito. En las latitudes bajas y medias de este macizo encontramos un extenso pinar repoblado a mediados del siglo xx, acompañado de algarrobos y acebuches, importante fuente de alimento para los carboneros, petirrojos, piquituertos y herrillos, entre otros animales, que se refugian en estos bosques.
11. Los Álamos del Avellano (Granada)
Junto a Granada podemos encontrar el valle del Darro, un estupendo y maravilloso canto al otoño circundado de sauces, almeces, olmos, zarzamoras y álamos centenarios. Visitar esta zona es embutirse de leyendas que a lo largo de los siglos ha formado el imaginario de Granada. Pasear por el sendero que transita bajo la ladera del Generalife mientras contemplas los líquenes que ocultan los troncos de los viejos árboles de hojas amarillas. Y todo ello sin perder de vista el Sacromonte.
12. Hoyo del Bote (Málaga)
En la localidad malagueña de Istán, más concretamente en el paraje conocido como Hoyo del Bote, podemos disfrutar de uno de los más bonitos castañares de toda Málaga. Aunque hay que decir que es pequeño en extensión, también hay que mencionar que alberga algunos de los castaños más grandiosos de toda la comunidad, un ejemplo de esto es el famoso Castaño Santo, un árbol digno de ver, pues su tronco tiene casi catorce metros de perímetro y más de veintitrés metros de altura. El calificativo de “santo” proviene de la historia que cuenta que el rey Fernando el Católico celebró bajo este árbol una misa antes de aplastar la revuelta morisca en Sierra Bermeja.
13. Entorno de Yunquera (Málaga)
Aunque en el pueblo de Yunquera no existen extensos bosques, los castaños también están muy presentes en sus alrededores, no por nada son para muchos turistas el principal reclamo para visitar a esta localidad. Recomendamos que se visite su pinsapar pues en el momento en el que se va tomando altura (visitar los miradores del Puerto del Saucillo y de Luis Ceballos) podrás disfrutar de unas coloridas y estupendas panorámicas de los distintos castaños (especialmente tras la segunda quincena de noviembre).
14. Bosque Encantado de Lugros (Granada)
La Dehesa del Camarote o también llamado Bosque Encantado, es uno de los valores naturales más bonitos de Sierra Nevada. Es uno de los bosque más impresionante de Granada por la riqueza natural que en él podemos ver (cerezos silvestres, majuelos, fresnos, agracejos, robles, castaños, quejigos, arces, rosas silvestres… Aunque cualquier estación del año es buena para pasear bajo sus árboles es en otoño cuando te quedarás anonadado por la diferente gama de tonalidades que este paraje presenta. Es un lugar mágico.
15. El Quejigal de Tolox
El Quejigal de Tolox es único en el mundo debido a que no existe otro que esté por encima de los 1.700 m. Este precioso bosque está formado de un quejigo muy especial pues tiene un genotipo diferente al de otros ejemplares de su misma familia, por ello ostenta hojas más redondas y pequeñas y también menos lobuladas.
Así que si quieres ver algo único en el mundo este bosque es tu destino.
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DÓNDE ALOJARSE
Hotel Fuerte Grazalema
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